El verano que ya se acaba ha sido muy caluroso este año 2016,seco y con demasiados incendios accidentales o provocados, el 21 de septiembre comienza el otoño, hoy es más bien un día otoñal, el calor ha disminuido bastante, está nublado como si quisiera llover lo que complicaría el regreso de Mª del Carmen a casa, confío que no sea así. Las estaciones en las que se divide el año se suceden inevitablemente por lo que se deben asumir tal cual se comportan, cuando deje de hacer calor, pasados unos días ya no nos acordaremos de que lo padecimos. Cada estación tiene sus propias características que las hace únicas y diferentes, hay que amoldarse a las formas que tienen de presentarse ya que si no nos amoldamos a ellas podrían resultar bastante insoportables. El llamado cambio climático puede que influya en la forma de comportarse las estaciones por lo que es importante respetar la naturaleza y el medio ambiente con el fin de que cada estación mantenga las características con las que siempre desde el origen del mundo ha tenido. El verano tiene una ventaja que no tienen el resto de estaciones, se necesita menos ropa además de coincidir con las vacaciones para la mayoría de las personas hasta el punto que en el mes de agosto se hace más difícil encontrar tiendas o servicios básicos que todas las personas necesitamos como pueden ser zapateros o tintorerías por ejemplo. Hoy ya había más puestos abiertos en el centro comercial al que acudo todos los días para hacer las compras de verduras, carnes, pescados o ultramarinos. Durante el verano que llega a su fin en el mes que estamos terminando solo había un puesto de frutas, uno de pollería y de pescadería, todos los demás puestos incluido el del pan estaban cerrados, por suerte la farmacia en la que compramos las medicinas no ha cerrado durante el verano. Tenía que poner tapas a unas sandalias y aún tengo que esperar a pasado mañana que abra el taller el zapatero. La ventaja de
